
Mi esposa y yo disfrutando de unas inolvidables vacaciones en Punta Cana. Digo inolvidables porque llovio sin parar durante 7 dias y nunca conocimos el espectacular mar de Santo Domingo. Mas alla de aquel diluvio disfrutamos de otros placeres de las vacaciones, pero puertas adentro. Sino miren la cara de felicidad de Vero, (y de la asistente de mesa!)...upsss!!!